La compra de cualquier propiedad siempre requiere de una evaluación, no solo a nivel monetario, sino también las condiciones del terreno, estructura, ubicación, entre otros. Pero esto no son todos los aspectos a tener en cuenta.
Hoy en OCAI queremos mostrarte cuáles son aquellos otros aspectos clave que se deben tener en cuenta antes de comprar una finca rústica, para no precipitarse y terminar descontento y para nada satisfecho con lo adquirido.
¿Cuáles son los aspectos claves para no tener problemas al comprar una finca rústica?
Conocer todos los aspectos legales y fiscales
Comprar fincas rústicas no es como comprar un coche y muchas veces le damos más vueltas a la compra que al tipo de coche que queremos, analizando el motor, sus extras, la tapicería… que cuando compramos una vivienda o finca. Y si lo pensamos bien, está última es una adquisición de mucho más valor.
Así, al estar interesado en comprar una finca rústica debemos solicitar una serie de documentación que acredite que la vivienda es completamente legal y que toda la documentación se encuentra vigente. En este aspecto se tiene siempre presente manejarse con recibos IBI, valoraciones fiscales, entre otras documentaciones. Además, desde OCAI te recomendamos siempre hacer una inspección detallada del lugar y la situación en la que se encuentra. No bastará con mirar de reojo la finca, debes hacer una examinación detallada para evitar complicaciones económicas a futuro.
Básicamente es cuidarse las espaldas y evitar malos entendidos y sorpresas desagradables.
Las lindes en una finca rústica
Otro de los problemas que se presenta con más frecuencia en una finca rústica y al que debemos prestar especial atención, son las lindes. Las lindes de una parcela representan la línea que separa unos terrenos o propiedades de otros, es decir, el límite o límites hasta los que superficialmente se extiende la finca. Muchas veces, la superficie que está presente en el registro no coincide con el catastro. Ante esta situación, se debe medir la finca con un topógrafo y realizar en muchos casos comprobaciones con los vecinos para ver si están de acuerdo. En caso de cualquier incorrección en los datos, se debe realizar la gestión oportuna para hacer los cambios necesarios.
Conflictos con el agua de una finca rústica
El agua es uno de los puntos más importantes a tener en cuenta a la hora de comprar una finca rústica. En muchos casos los pozos no están legalizados, por lo que debemos negociar la responsabilidad sobre los trámites adecuados para normalizarlos. Así, antes de la compra, es importante verificar si el caudal de agua es suficiente para la finca y que todo se encuentra en orden.
Herencias y donaciones en fincas rústicas
También es muy frecuente que una finca rústica esté a la venta por parte de herederos o que sea fruto de una donación. Estas situaciones requieren de un proceso de trámite, que muchas veces no se ha resuelto antes de poner a la venta el terreno, lo que imposibilita o, como mínimo, dificulta la operación. Es por este motivo, que en ocasiones puede ocurrir que varios miembros hayan heredado una misma finca rústica. Si esta no puede dividirse, existe la posibilidad de crear diferentes escrituras a nombre de todos los herederos. Lo que se conoce como proindiviso. Entonces, los propietarios del terreno rústico deberán ponerse de acuerdo para llevar a cabo la gestión y su venta.
Antes de pagar por la finca, firma un contrato de compraventa
Es importantísimo que cumplas con este aspecto, sin este, las probabilidades de que tengas problemas legales en el futuro son altísimas. Imagina comprar una finca con grandes extensiones sin firmar ninguna documentación que establezca que la compraventa se hizo legalmente. En cualquier momento podría venir el dueño anterior y mediante acciones legales, alegar que esta finca es suya.
De este modo, ante la posibilidad de una estafa, lo mejor es cubrirse las espaldas y hacer los trámites como toca. Por ello, busca testigos y un abogado para que estén presentes en el momento de comprar un terreno. Así estarás reduciendo los problemas a casi cero.
Así, pues, si queremos comprar una finca rústica, sin tener problemas, lo suyo sería que contactarás con nosotros, para que antes de la compraventa podamos analizarla y ver que todo está en orden, evitando así futuros dolores de cabeza.